sábado, 1 de noviembre de 2008

LA REINA


Mañana estamos de fiesta. España estará de fiesta... y lo digo así de categórico. Y el motivo no es otro que el festejar que un día como el de mañana hace setenta años nació en Atenas nuestra Reina. Sí, esa persona que ahora a todo el mundo le ha dado por recordar a diestro y siniestro que es la Reina Consorte de España. ¿Y qué más da eso? Ella es la Reina Dña. Sofía, la Reina de todos los españoles... y punto.

Antes de nada, y como creo que no se va a echar nadie las manos a la cabeza por lo que yo diga, vaya por delante que mi persona piensa exactamente lo mismo que la Soberana de este país… y no soy reina, salvo de mi casa… y contando que me gustara el tratamiento femenino, que no es el caso.

¡Y vaya tela cómo están los mentideros de alterados, enojados e iracundos con lo que Su Majestad ha dicho o ha dejado de decir! ¡La que se ha liado, Madre del Amor Hermoso! ¿Pues saben lo que digo? Que al que le pique que se rasque… y que ya está bien de tanta tontería. ¡Ay, esta España mía siempre tan hipócrita… y tan ingrata! ¿O acaso hemos olvidado el momento en el que nuestro Rey, su esposo y compañero (y por el que es Reina Consorte), firmó y sancionó la ley de los matrimonios homosexuales? Menudo ejemplo democrático y político, que posiblemente aún no han sabido apreciar esos gallifantes del stablishment del “power rosa” y la “cultureta gay”. Ya se sabe que de dónde no hay no se puede sacar...

Estoy de acuerdo con que los Reyes no deben exponer su opinión sobre asuntos políticos o sociales y que las declaraciones de Dña. Sofía a la periodista Pilar Urbano pueden ser incorrectas, bastante indiscretas y tal vez muy imprudentes, pero también tengo muy claro que vivimos en un país donde existe la libertad de expresión para todos y cada uno de sus habitantes; y por eso me sorprende aún más la que se ha formado porque una señora de setenta años ha dicho lo que piensa y corresponde a su edad… por muy reina que ésta sea, que aún consorte… ¡lo es!

La Carta Magna dice, en su artículo 14, que los españoles son iguales ante la ley y no creo que expresar algo que uno siente sea una falta de respeto a una ley que como tal todos debemos acatar. Y he escrito bien: ¡Todos debemos acatar!

Ella -y no otra- ha sido la autora de la modernización de la monarquía española, la que le ha dado respetabilidad a la Institución y la que siendo toda una “profesional” nos ha ayudado a ponernos en el mundo…en todos los sentidos.

Ella, que ni reina ni gobierna, ha dejado de ser la pava real y sin pompa ni alfombra roja, con más de dos dedos de frente, sincera, elocuente y aparcando su ecuanimidad ha expresado lo que siente. Sí, ella se ha permitido decir lo que piensa, como un ser humano más, y nos hemos olvidado que son sus ideas… y aquí, al otro lado de la reja del Palacio Real, monárquicos, republicanos o constitucionalistas nos hemos rasgado las vestiduras con sus manifestaciones. ¡Basta ya! ¿Dónde está el escándalo? ¡Ah, que hay que comer y a río revuelto, ganancia de pescadores!

Dejemos los disfraces y esa absurda hipocresía. El hecho de que esté obligada en lo oficial a tragar sapos y culebras y aguantar elegantemente como una reina, no considero que sea extensivo a que le sean disminuidos sus derechos a la hora de mostrar su pensamiento y su actitud personal y privada, cuando se representa a sí misma.

Majestad, vaya desde este sueño imposible mi afecto, mi consideración, mi respeto y mi total y absoluta admiración por su personalidad, su dignidad, su entereza, su valentía, su inteligencia, … sin permitirse perder jamás su calidad de reina y lo que es mucho más importante aún, ser mujer. Y muchas, muchísimas felicidades mañana y... ¡siempre!


PD.: Ahh, y no olvide que es la Reina de España, un país en el que parece ser molestan y desagradan las personas como Ud., posiblemente porque no cuadran con la mediocridad que a veces tristemente lo define… y retrata.

1 comentario:

Nacho dijo...

¡Dios salve a la Reina! de tanto mentecato y mentecata, mentomentó y mens insana!
Yo también estoy de acuerdo con la Reina y ya está bien de rasgarse las vestiduras que siempre estamos con lo mismo.
Respecto al par de líneas donde opina sobre el mal llamado "matrimonio gay" sólo hago alusión a la definición de la palabra matrimonio: "Unión de hombre y mujer concertada mediante determinados ritos o formalidades legales" (www.rae.es)
Respecto al aborto y eutanasia entramos en lo moral y por tanto queda para cada uno su opinión.
Respecto a ¿debe la Reina o no debe opinar? jejeje me da la risa con algunos/as, veamos:
La Reina ciertamente es la consorte del Rey, y en la Constitución se dice que "los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno" luego el Rey por sí mismo no tiene poder para hacer de su capa un sayo ¡imaginaos la Reina!. Pues bien, si en cuanto a los actos de los reyes andamos por estos lares... creo que no merece la pena ni siquiera entrar a cuestionar sus opiniones personales.

En fin, hablar del tema genera dinero en los medios, que al final es lo que cuenta para los que se someten al euro y no tienen principios.